La normativa ISO 45001, auditorías de certificación
Las normas ISO sirven a empresas y organizaciones para mostrar su excelencia y su firme propósito de seguir creciendo y apostando por procesos de mejora continua. Hasta la aparición de la norma ISO 45001, estos sistemas de seguridad y salud en el trabajo se certificaban bajo los requisitos que establecía la norma OHSAS 18001.
El objetivo que persigue la norma ISO 45001 es responder a la necesidad que existe en cuanto a la prevención de riesgos laborales. En este sentido, la norma ofrece estándares que permiten a las empresas certificar sus Sistemas de Gestión en Prevención de Riesgos Laborales, al igual que sucede con los sistemas de calidad o de medio ambiente. Las empresas certificadoras someten periódicamente a auditorías de prevención de riesgos laborales. Si durante el transcurso de la Auditoria de prevención, todo está conforme a lo que dicta la norma ISO, la empresa consigue su objetivo de mejora continua y esto le sirve para presentarse frente a sus clientes como una empresa competitiva.
La auditoría reglamentaria frente a la auditoría de certificación
Debido a que todas las empresas del sector de la construcción están obligadas a cumplir con la legislación en base a los Servicios de Prevención de Riesgos Laborales, esta normativa obliga a realizar auditorías reglamentarias, especialmente en aquellas empresas que no tienen concertado el Servicio de Prevención con una entidad ajena a la empresa, atendiendo así a lo dispuesto en el artículo 30.6 de la Ley 31/95, Ley de Prevención de Riesgos Laborales y el artículo 29.2 del Real Decreto 39/97 Reglamento de los Servicios de Prevención.
Tenemos así que la Auditoria reglamentaria es de gran importancia, puesto que no someter el sistema de prevención al control de una auditoría externa cuando no se ha concertado el servicio de prevención con una entidad especializada constituye una infracción administrativa en el orden social. La reglamentaria, por tanto, es una auditoría legal para comprobar los servicios de prevención con los que cuenta una empresa.
La auditoría de certificación, para cumplir con la norma ISO 45001 y anteriormente con OHSAS 18001, es voluntaria, de modo que no existe obligación para la empresa de realizar auditoría de certificación de sus sistema de gestión de la prevención basado en esta norma, salvo, eso sí, exista un requisito del cliente.
Con las auditorías reglamentarias se hacen análisis del cumplimiento de la legislación y un estudio profundo de todos los procedimientos y medios requeridos para realizar las actividades preventivas. Esta es una gran diferencia frente a las auditorías de certificación, donde únicamente se comprueba si la organización ha implementado un sistemas para la gestión de los aspectos de la seguridad en el trabajo, y que estas medidas vayan en sintonía con la política de empresa y estén enfocados hacia la mejora continua.
Existen varias diferencias más, como por ejemplo el alcance de la auditoría, el criterio de la misma, la periodicidad o los informes que se elaboran, pero básicamente la principal diferencia es que la auditoría reglamentaria es una práctica legal y obligatoria mientras que la certificación es una apuesta de empresa, o bien, una exigencia de los clientes, para asegurar que la empresa contratada cumple con unos estándares suficientes de garantía en la seguridad en el trabajo.
¿Qué buscan las empresas con la adopción de la normativa ISO 45001 en su organización
La norma ISO 45001 sobre Sistemas de Gestión de seguridad y salud ofrece a las empresas la posibilidad de integrar la prevención en la organización apostando por los sistemas estandarizados de las normas ISO, para garantizar así entornos de trabajo seguros y saludables, así como al prevención de lesiones y deterioro de la salud. Para validar el cumplimiento con esta normativa, de manera periódica, las organizaciones que quieren logar esta certificación deben someterse a una auditoria de certificación.
Las empresas que comienzan la implantación de la norma ISO 45001 no solo esperan cumplir con la legislación, sino sacar partido de lo que propone esta certificación. La implementación requiere de un gran esfuerzo por parte de las organizaciones, tanto en materia de recursos humanos como materiales, además de un coste de infraestructura importante, especialmente en el momento de las auditorías de certificación.
Lo importante no es pensar en lo que puede aportar la norma, sino en tomar de esta lo más relevante para así hacer más competitiva a la organización, sus empleados y las partes interesadas en la seguridad y salud en el trabajo, que es lo que regula esta norma.
Fuente. CINCO NOTICIAS.